CLASIFICACIÓN DE LOS DESASTRES NO INTENCIONALES, SEGÚN SU ORIGEN
Para entender y mejorar la Gestión del Riesgo de Desastres, conviene tener claridad sobre el origen de los eventos que nos pueden afectar. Esta es una interesante clasificación del origen de eventos de tipo desastres no intencionales, es decir aquellos no causados a propósito, presentada en Gestión de Riesgo Vzla*:
No observa los eventos de origen intencional como los asociados con el conflicto armado, el desplazamiento forzado, la migración entre países, que también demandan acciones de diagnóstico, mitigación, prevención, respuesta y recuperación, muchas de ellas por las mismas entidades que enfrentan los eventos no intencionales. Por todo eso también hay que tenerlas en cuenta.
Incluso hablamos de los eventos complejos o de doble afectación, que involucran ambas variables. La avenida torrencial de Mocoa, al Sur de Colombia, que mató más de 400 personas en el 2017, ofrece una buena oportunidad de análisis al respecto: en principio sería un evento de origen natural no intencional, pero también puede ser de origen socio-natural: ese tipo de avalanchas también son producidas por la intervención humana en el territorio, que tiende a acelerar e intensificar la intensidad y frecuencia del evento. Y afectó principalmente a comunidades desplazadas por el conflicto armado en esa región, que ocuparon los sectores más expuestos a la amenaza, incluso con autorización y estímulo de las autoridades territoriales. Primero las afectó el conflicto, obligándolas a desplazarse y ubicarse en zonas de alto riesgo, y luego la avalancha. Por eso su afectación fue doble, y se trata de eventos complejos. Todo esto sin evaluar las enormes vulnerabilidades institucionales, sociales y generales que magnificaron el riesgo y el posterior desastre subsecuente, pero ese es tema de otras notas.